Derrota en un cuarto de hora

08/02/2010

El colista sorprendió al conjunto de Antonio Rivas, que no reaccionó hasta el segundo periodo.


El CD Tenerife B aunó trabajo, funcionamiento colectivo y talento individual para apuntarse sin grandes complicaciones una nueva victoria a su cuenta. El Leganés, víctima ayer de los isleños, decepcionó en su actuación en Tíncer. El quinto clasificado por la cola y el quinto clasificado por arriba no justificaron sobre el césped la posición que ocupa cada uno en la clasificación. Todo lo contrario.

El Tenerife B, muy metido en escena, borró del campo a un Leganés tan lento como incapaz de jugar el balón al pie. Los madrileños bailaban torpemente al ritmo de los locales, cada vez más verticales con el paso de los minutos.

Airam, ¡cómo no!, se encargó de abrir el marcador en la primera jugada en la que el talento de Josmar se dejó ver. Antes, un batallador Rubén Rosquete, en dos ocasiones y ambas asistido por la inteligencia de Roque, pudo haber abierto el marcador.

El gol no cambió el panorama y a la media hora llegó el segundo, obra de un oportuno Rayco en una jugada mal defendida por un apático Iván Zarandona. El asedio tinerfeñista bajó la intensidad, pero una ofensiva sin aparente peligro acabó con un jugador local derribado en la entrada de ese “minipiso” que era el área del Leganés. El árbitro Rebollo López no dudó en señalar pena máxima y Airam, aunque al principio parecía que iba a ser Rosquete el lanzador, materalizó con cierto suspense su decimoquinto penalty en la Liga; todo un récord.

La segunda parte dejó otras instantáneas. Luis Ángel Duque, técnico visitante, habló a la conclusión de la mejoría de su equipo en ese período, de la igualdad de fuerzas y de tres claras oportunidades para el Leganés. En la del cabezazo de Zarandona al larguero todos estaremos de acuerdo, pero como las otras dos que citó el Tenerife B tuvo unas cuatro o cinco.

No se movió el marcador en este tiempo, en el que el segundo equipo blanquiazul no sufrió. Defendió su ventaja en el marcador con el balón en sus pies, continuó funcionando como un colectivo y, ante la impotencia del rival, siguió buscando el gol.

Con el triunfo casi asegurado, Jesús, Roque, Juan Ramón y Óscar Martín comenzaron a mostrar su catálogo de exquisiteces técnicas, a las que se apuntó en los últimos 15 minutos el recién fichado Jonay Díaz para que todos nos imaginemos por qué lo llamaban Romario.

Traspié rojiblanco en un mal partido del conjunto de Antonio Rivas que en ningún momento han sabido superar el planteamiento de su rival. De los últimos cuatro encuentros disputados tan sólo han conseguido un punto, lo cual demuestra que los colchoneros están inmersos en una pequeña crisis. La mejor solución, ganar el próximo domingo al Universidad de Las Palmas.

TENERIFE B

Toño Ramírez; Natael, Achi, Moreno, Jesús; Rayco (A), Roque Mesa (A), Alexis de Paz; Josmar (Juan Ramón 53′), Airam (Jonay Díaz 77′) y Rubén Rosquete (Óscar Martín 58′).

LEGANÉS

Raúl Moreno; Gustavo Miguel, Mario, Javi, Sergio Durán (A) (Aníbal Zurdo 45′); Iván Zarandona (Morato 65′) (A), Valleros; Juli (A) (Garci 70′) (A), Nacho Aznar, García Granero (AA 83′); y Quini.

ÁRBITRO

Rebollo López (colegio catalán). Amonestó al técnico leganense, Luis Ángel Duque.

GOLES:

1-0 Airam (26′). 2-0 Rayco (30′). 3-0 Airam (40′).
Centro Insular de Deportes, 700 espectadores.

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