El mago Dámaso y su aprendiz Fernando Camacho ilusionan con un brillante espectáculo de magia

El Mago Dámaso, uno de los mejores especialistas en cartomagia, dejó boquiabiertos a todos los asistentes que llenaban la sala para asistir al último “Jueves de EL ZOCO” del pasado 25 de junio. El maestro, acompañado por uno de sus pupilos, Fernando Camacho, sorprendió con un espectáculo de magia pleno de humor y fantasía.

El mago Dámaso, vecino de Leganés como quiso destacar, demostró durante su actuación que sin duda se trata de uno de los más prestigiosos magos de cartas del mundo y del creador de algunas de las técnicas cartomágicas más relevantes. A lo largo de todo su espectáculo, su depurada técnica en diferentes y variados juegos de magia, en los cuales hacía aparecer y desaparecer cartas, cambiarlas de colores e, incluso, que cartas blancas se transformaran en coloridos ases o que de sus manos surgieran de la nada un abanico completo con las cincuenta y dos cartas de la baraja francesa. Todo ello, además, ordenado con un ingenioso hilo argumental cargado de fina ironía y elegante humor que hizo las delicias de todo el público asistente que llenaba la sala.

La tarde había comenzado con una serie de juegos llevados a cabo por el mago Femando Camacho, quien manifestó que se trataba de una de sus primeras intervenciones en público. A pesar de todo demostró un buen sentido del humor y sorprendió con ingeniosos juegos en los que el público asistente tuvo ocasión de participar.

Terminado el show los asistentes tuvieron la oportunidad de mantener un ameno y animado debate con los magos, coincidiendo ambos en que la magia es un arte que exige una gran dedicación, un dominio técnico y grandes dosis de creatividad. Por su parte Dámaso hizo un recorrido por el estado nacional e internacional de la magia, destacando que “la magia de cerca en España es una de las más importantes del mundo”. También informó de que actuaba frecuentemente en la prestigiosa sala Houdini de Madrid y que este verano iba a ofrecer una serie de actuaciones dentro de los veranos de la Villa en el Centro Cultural Galileo. Por otro lado, Camacho indicó la satisfacción que le produce la práctica de la magia y destacó la suerte que había tenido por poder aprenderla de la mano de una gran maestro como Dámaso.